El presidente de la Unión Ciclista Internacional (UCI), David Lappartient, dijo que la federación “tiene el deber de garantizar, sobre todo, la igualdad de oportunidades para todos los competidores en las competiciones ciclistas”; es por eso que ha emitido el comunicado correspondiente a la prohibición de la participación de las ciclistas transgenero de competiciones femeninas.
Las nuevas reglas, que entrarán en vigor el 17 de julio, siguen reglas similares de otros deportes olímpicos como el atletismo y la natación.
“La UCI quisiera reafirmar que el ciclismo, como deporte competitivo, actividad de ocio o medio de transporte, está abierto a todos”, dijo Lappartient en un comunicado.
Pero el estado actual del conocimiento científico no garantiza tal igualdad de oportunidades entre las atletas transgénero y las participantes cisgénero, agregó.
“Como medida de precaución, (no es posible) autorizar a las primeras a competir en las categorías femeninas”, agregó Lappartient.
La UCI dijo que cualquiera que haya hecho la transición después de la pubertad masculina podría competir en una categoría ‘masculina/abierta’.
La UCI dijo que estaba abierta a cambiar estas reglas en el futuro a medida que evolucione el conocimiento científico.
La UCI dijo que comenzará conversaciones con otros miembros del movimiento deportivo internacional sobre el cofinanciamiento de un programa de investigación destinado a estudiar los cambios en el rendimiento físico de atletas altamente entrenados que se someten a un tratamiento hormonal de transición.
El año pasado, las principales ciclistas femeninas británicas amenazaron con boicotear los eventos después de que Emily Bridges, de 22 años, quien fue eliminada del programa de la academia británica como ciclista masculina, intentó unirse al equipo omnium femenino.
Pero fue la victoria de la ciclista transgénero estadounidense Austin Killips en un evento femenino de la UCI hace dos meses lo que llevó al órgano rector a reabrir la consulta sobre el tema.
