Con disparos al aire y camiones lanzaaguas, milicianos talibanes reprimieron una protesta de decenas de mujeres que se reunieron en Kabul para manifestarse en contra de las medidas del régimen de cerrar los salones de belleza femeninos,
La decisión de cerrar los salones de belleza terminaron con una fuente de ingresos muy importante, además de que cerraron uno de los pocos lugares en donde se les permitía trabajar a las mujeres.
A pesar de que en Afganistán son muy poco frecuentes las protestas debido al miedo que existe a la represión de los fundamentalistas, varias mujeres se congregaron con distintas consignas como “trabajo, comida, justicia”.
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“Las fuerzas de seguridad de los talibanes ejercieron violencia contra nosotras, abrieron fuego, nos echaron agua, golpearon a las niñas y se llevaron sus teléfonos”, declaró una manifestante.
La protesta buscaba revertir la decisión que afecta aún más a las mujeres que habitan un país en donde no pueden trabajar para organizaciones internacionales, acceder a parques, jardines, gimnasios o baños públicos o viajar sin ir acompañadas de un familiar varón.
“Los informes sobre la represión de una protesta pacífica de mujeres contra la prohibición de los salones de belleza, la última negación de los derechos de las mujeres en Afganistán, son profundamente preocupantes. Las afganas tienen derecho a expresar sus opiniones sin violencia”, dijo la Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán (UNAMA) en Twitter.
