El Tribunal Superior de Justicia de España dictaminó una orden de alejamiento para impedir que el exjefe del fútbol nacional Luis Rubiales se acerque a la jugadora de la selección Jenni Hermoso, durante su comparecencia ante el juzgado para ser investigado por agresión sexual tras besarla en los labios.
El incidente ocurrió en medio de la ceremonia de entrega de medallas tras la victoria de la selección femenina española en el Mundial de Australia el pasado 20 de agosto.
El hecho desató un debate y protestas en contra del sexismo ferviente que se vive en el deporte y la sociedad española.
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El exdirectivo de 46 años ha asegurado que el beso con la jugadora del Club Pachuca fue consensuado, mientras que Hermoso declaró que fue forzado.
La orden consignada impide que el exdirigente se trate de poner en contacto con Hermoso o se acerque a menos de 200 metros de ella, según un comunicado judicial.
Francisco de Jorge, el juez en cuestión, rechazó una petición de la fiscalía para que Rubiales se presentara en el juzgado cada dos semanas.
Rubiales abandonó el Tribunal Superior de Justicia de Madrid con su abogada Olga Tubau tras una vista de investigación a puerta cerrada que duró cerca de una hora.
Según un comunicado de la fiscalía, el expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) negó las acusaciones durante su declaración.
