La decisión de la FIA de iniciar una investigación por presunto conflicto de intereses entre Susie Wolff, directora de la F1 Academy, y Toto Wolff, director técnico y CEO de Mercedes AMG Petronas F1 Team, ha provocado una feroz y coordinada reacción por parte de todos los equipos de la parrilla de la Fórmula 1.
Desde primera hora de la mañana de este martes 6 de diciembre, Auto Motor und Sport (AMuS) había divulgado que la propia F1, Liberty Media (la propietaria de los derechos internacionales), y los otros 9 equipos, además de Mercedes, que ya había desertado de su Team Principal, están presionando a la FIA.
Además de dejar la duda de quién podría estar mintiendo en esto; situación entre la propia Federación o equipo de algunos de los involucrados; dando a entender incluso que la FOM amagaba (nuevamente) con la creación de un campeonato independiente a la FIA si no se destituye a su presidente: Mohammed Ben Sulayem.
Ayer la FIA publicó una nota en la que examinaba un supuesto conflicto de intereses respecto a la transferencia de información confidencial entre el director de un equipo y la empleada de la FOM.
La Federación no mencionó nombres, sin embargo, era bastante obvio que las personalidades en cuestión eran Toto y Susie Wolff, siendo esta última la directora ejecutiva de la serie F1 Academy, quien en su poder tendría información privilegiada para el equipo de Brackley y su esposo en contraparte para la FOM.
La FIA afirmó ayer que su investigación sobre el llamado cumplimiento fue motivada por importantes especulaciones mediáticas, en particular una referencia a un artículo de la revista BusinessF1, mientras que fuentes de la FIA revelaron que había habido quejas de algún jefe de equipo, no especificado.
Hace unas horas, sensacionalmente, se puso en duda esta última información, y los 9 equipos restantes afirmaron que no estaban involucrados en ninguna queja al respecto.
La nota de los equipos, al unísono, mencionaba lo siguiente:
“Podemos confirmar que no hemos presentado ninguna queja ante la FIA con respecto a la acusación de información de naturaleza confidencial transmitida entre un director de equipo de F1 y un miembro del personal de la FOM. Estamos encantados y orgullosos de apoyar a la Academia F1 y a su CEO a través de nuestro compromiso de patrocinar a un participante con nuestras decoraciones a partir de la próxima temporada”.
Se trataba claramente de un documento compartido y coordinado para mostrar apoyo a una colega directiva como Susie Wolff; por otro lado, un movimiento bastante claro que parecería no sólo dejar a la Federación más aislada en la persona del presidente Ben Sulayem, sino también mostrar inequívocamente de qué lado están los equipos.
Te podría interesar: TOTO Y SUSIE WOLFF SON INVESTIGADOS POR LA FIA POR PRESUNTO CONFLICTO DE INTERESES
En este punto el organismo federado tendrá que dar una respuesta: ¿de quién provienen estas denuncias?
No es ningún misterio que el primer nombre en el que se pudo pensar fue el de Christian Horner, dadas sus continuas polémicas con y contra Toto Wolff, también en torno a los acontecimientos relacionados con el tope presupuestario.
Sin embargo, el director del equipo Red Bull ya se había adelantado al desmentir esta insinuación a Sky Sport UK:
“Red Bull ha sido el equipo que más ha estado involucrado con la Academia de F1 desde sus inicios y hasta el punto que entre los dos equipos propiedad de Red Bull inscribiremos tres autos. Trabajamos estrechamente con Susie, quien hizo un gran trabajo en la Academia de F1. Creo que nos sorprendió bastante la declaración que salió anoche. Pero ciertamente no fue instigado, solicitado o iniciado por Red Bull”.
Mercedes y Susie Wolff, por su parte, ya habían respondido con dureza a las acusaciones, pidiendo claridad y transparencia sobre los motivos que motivaron la investigación, y el equipo de Brackley confirma actualmente que no se ha puesto a disposición de las partes ninguna aclaración.
