El Consejo de Seguridad de la ONU ha vuelto a aplazar la votación de una resolución sobre el conflicto entre Israel y Hamás, en medio de tensiones diplomáticas y una creciente crisis humanitaria en Gaza.
El borrador de la resolución, que pide medidas urgentes para permitir el acceso seguro de la ayuda humanitaria y condiciones para un cese sostenible de las hostilidades, ha experimentado varios retrasos y modificaciones.
Estados Unidos, que previamente se opuso a algunas propuestas, expresó disposición a respaldar la versión actual; la embajadora de EE. UU. ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, afirmó que el proyecto es sólido y cuenta con el apoyo del grupo árabe.
La resolución, patrocinada por Emiratos Árabes Unidos, exige el acceso sin obstáculos para la ayuda humanitaria en Gaza, pero no solicita un alto el fuego inmediato.
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Las disputas diplomáticas persisten, mientras la situación empeora en Gaza. Israel ha bombardeado un paso de ayuda recién reabierto, y Hamás ha infiltrado Israel, causando víctimas civiles. El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, condiciona un alto el fuego a la “eliminación” de Hamás.
