Los 500 metros de la frontera entre Ciudad Juárez y El Paso fueron militarizados por elementos de la Guardia Nacional estadounidense al mismo tiempo que decenas de miles de solicitantes de asilo en la frontera esperaban un fallo de la Corte Suprema que permitiera ellos para entrar a los Estados Unidos.
La iniciativa fue propuesta por el gobernador texano Greg Abbott, quien decidió enviar a cientos de militares de la Guardia Nacional estadounidense a custodiar la frontera del Río Bravo.
Por su parte, el gobierno de Estados Unidos le pidió a la Corte Suprema que no derogue el título 42 antes de Navidad.
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El presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, emitió una orden temporal para mantener vigentes las restricciones de la era de la pandemia. En caso de que Roberts no dictara esa orden, la restricción estaba programada para expirarar el miércoles.
Actualmente se vive una crisis de migración en la frontera estadounidense. Uno de los factores más agravantes es que la mayoría de las personas que cruzaron entonces eran nicaragüenses, a los que Estados Unidos no puede deportar por la falta de relaciones diplomáticas con el Gobierno de Daniel Ortega.
El gobierno mexicano tampoco los ha recibido, por lo que muchos de ellos se han quedado en las calles de El Paso estos días, debido a que los albergues de la ciudad se encuentran saturados.
¿Qué es el título 42?
Se trata de una regla de salud pública a través de la cual los funcionarios estadounidenses han expulsado a 2.5 millones solicitantes de asilo y han rechazado a la mayoría de las personas que solicitaron asilo en la frontera, con el argumento de prevenir la propagación de COVID-19.
Por su parte, el alcalde demócrata de El Paso, Oscar Leeser, advirtió que los refugios al otro lado de la frontera en Ciudad Juárez estaban repletos, ante la estimación de que podrían llegar 20 mil migrantes.
