El día de ayer Pistons y Magic protagonizaron una pelea campal en uno de los últimos partidos del año de la NBA. Un partido sin trascendencia alguna terminó con una primera mitad sumamente caliente en cuanto a ánimos.
A falta de menos de un minuto para que el segundo cuarto acabara, el jugador del Orlando Magic, Mo Wagner y el base de los Detroit Pistons ,Killian Hayes, disputaban un balón que se iba por un costado. Mientras la esférica salía del campo, Wagner empujaba a Hayes y lo manaba directo a la zona de la banca de los Pistons. Inmediatamente, ambas escuadras empezaron a empujarse y Hamidou Diallo empujaba a la misma zona a Wegner. Un segundo después, Hayes le respondía el empujón a Wagner con un golpe de espaldas directo a la nuca.
No es sorpresa que los Detroit Pistons estén involucrados en riñas en la NBA. Si recordamos a los Pistons de los 80’s y los 90’s eran conocidos por la rudeza con la que disputaban cada balón, no por nada se les conocía como los “Bad Boys”. No obstante, lo de ayer fue un acto ridículo por parte de ambos equipos. Un partido en el que no se definía nada, que tenía una diferencia de 19 puntos y se encontraba a 30 segundos del descanso, pudo terminar en una tragedia.
El golpe que recibió Wagner por parte de Hayes fue altamente riesgoso. Un golpe en la cabeza que lo dejo en “nocaut” por unos momentos, pero que pudo haber sido de mucho mayor riesgo. Al final, los tres jugadores involucrados fueron expulsados del juego y se marcharon a los vestidores.
En cuanto al resultado que pasa a segundo término, fue de 121-101 para los Pistons quienes se encuentran en el último lugar de la conferencia del este, mientras que el Orlando Magic se ubica en la antepenúltima posición de la misma conferencia.
