El año pasado, Ezra Miller vio cómo su prometedora carrera se desmoronaba tan rápido como su personaje, The Flash, en la película de Warner. La mala fama de Miller probablemente influyó en el fracaso comercial de la costosa producción, condenando a la joven promesa al olvido.
En ese momento, los problemas psicológicos y de drogas de Miller eran especialmente notorios. Varios escándalos dañaron su reputación como ícono LGTB (se identificaba como no binario) y su potencial en taquilla. Durante la pandemia, videos mostraron a Miller agrediendo a una fan en Islandia y participando en varios altercados.
El caos alcanzó su cúspide cuando Miller fue acusado de secuestrar a Tokota Iron Eyes (Ojos de Hierro), una joven con la que supuestamente inició una relación cuando ella tenía 12 años. Los padres acusaron a Miller de forzar a la joven a dejar el colegio, suministrarle drogas y abusar sexualmente de ella. La Policía descubrió rifles y balas en la granja de Miller en Vermont, y se sospechó que podría liderar una secta poliamorosa, con armas y balas al alcance de niños en su propiedad.
En 2022, Miller fue arrestado en Hawái por un altercado en un karaoke y nuevamente en Vermont por robo. Las acusaciones se acumulaban, sugiriendo graves problemas mentales.
El divorcio de sus padres y su supuesta fuga con la activista indígena Tokata Ojos de Hierro colmaron el vaso. El grupo que rodeaba a Miller lo consideraba un Mesías Indígena no binario que, al unirse con Tokata, provocaría el Apocalipsis, y ambos huyeron.
Aquí llegan las novedades. Dos años después de la crisis, Chase Iron Eyes, el padre de Tokata, ha retirado todos los cargos contra Ezra Miller. “Retiré los cargos basándome en la retractación de un testigo. Por lo tanto, retiré los documentos en el tribunal”. En una publicación de Instagram, Iron Eyes negó que Miller acosara o abusara de su hija y se disculpó, explicando que las acusaciones surgieron en un contexto de “guerra total”.
“Estamos trabajando para superar esto, reconciliarnos y sanar. Mientras Tokata esté bien, nosotros también lo estaremos”, dijo, disculpándose con Miller y aclarando que el testimonio original provenía de un acosador del actor.
El año pasado, Miller reapareció brevemente para promocionar The Flash y admitió sus problemas mentales. En medio de una crisis de imagen, pidió perdón al estudio y comenzó un tratamiento para su salud mental. Desde entonces, no se ha sabido más de él.
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