Moo Deng, una adorable bebé hipopótamo, se ha convertido en una sensación en redes sociales, acumulando miles de seguidores gracias a su ternura y actitud juguetona. Su historia comienza en el zoológico Khao Kheow en Chon Buri, Tailandia, donde se presentó al público 15 días después de su nacimiento, el 10 de julio.
Desde entonces, ha generado un verdadero fenómeno viral, protagonizando memes y capturando los corazones de los internautas de todo el mundo. Esta bebé hipopótamo pertenece a la especie de hipopótamos pigmeos, una variante en peligro de extinción, caracterizada por su menor tamaño en comparación con los hipopótamos comunes.
Su fama ha dado un impulso significativo al zoológico, aumentando el número de visitantes y seguidores en redes sociales.
Impacto viral
El nombre de Moo Deng fue elegido mediante votación popular, un detalle que ha incrementado la conexión emocional de los seguidores con esta bebé hipopótamo; sin embargo, su popularidad despegó gracias a sus graciosos berrinches, especialmente cuando se la baña o alimenta.
Con su hocico abierto en una especie de “amenaza adorable”, Moo Deng ha inspirado memes que reflejan las frustraciones cotidianas de muchas personas.
Estas imágenes rápidamente se viralizaron, llevando la fama de Moo Deng más allá de los límites del zoológico tailandés.
El zoológico Khao Kheow ha sido uno de los principales beneficiados por el fenómeno de Moo Deng; en redes sociales como X (antes Twitter) y YouTube, sus seguidores han aumentado exponencialmente.
La cuenta oficial del zoológico ha alcanzado más de 60,000 seguidores, mientras que su canal de YouTube ya cuenta con 4.65 mil suscriptores, quienes no se pierden ningún video o foto de la pequeña Moo Deng.
La influencia de Moo Deng fuera de las redes
El impacto de la cría no se limita solo al mundo digital; su fama ha inspirado la creación de productos y merchandising que se venden tanto en el zoológico como en tiendas asociadas.
Cafeterías locales han creado pasteles con su forma, y marcas de maquillaje han comenzado a promocionar productos para replicar el color de sus mejillas. Gracias a este furor, Moo Deng ha ayudado a duplicar la cantidad de visitantes al zoológico desde su presentación, un impulso económico importante para la conservación de la especie.
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