La plataforma digital X, antes conocida como Twitter, dio a conocer que ya cumplió con todas las exigencias de la Corte Suprema de Brasil, por lo que solicitaron el desbloqueo de la red social en el país.
Desde el pasado 31 de agosto, el sitio antes conocido como Twitter, está suspendida tras la orden de un juez del Supremo Tribunal Federal (STF), quien acusó a la plataforma de incumplir órdenes judiciales que le exigían retirar cuentas acusadas de desinformar y nombrar un representante legal en Brasil.
Ante el bloqueo, la empresa adquirida por el magnate sudafricano Elon Musk en 2022, presentó nuevos documentos solicitados por el magistrado del STF, Alexandre de Moraes, por lo que afirma ya haber cumplido con todas las exigencias de la justicia brasileña, según afirmó una fuente que solicitó mantener el anonimato.
Tras cumplir con los reglamentos solicitados, X ahora solicitó su restablecimiento en Brasil, donde hasta su suspensión tenía 22 millones de usuarios.
X dijo estar “dedicado a proteger la libertad de expresión dentro de los límites de la ley” y que respeta “la soberanía de los países” donde opera, según un tuit publicado al final del jueves en su cuenta de Asuntos Gubernamentales Globales.
“Creemos que el acceso de la población brasileña a X es esencial para una democracia dinámica y continuaremos defendiendo la libertad de expresión por medio del debido proceso legal”, añadió en un mensaje en inglés y portugués.
De Moraes da cinco días plazo a X para cumplir con requerimientos de Brasil
Durante días anteriores, la red social había cumplido al asignar un representante legal en Brasil, una de las exigencias para volver a funcionar.
Sin embargo, a través de un documento legal emitido el sábado, Moraes consideró que la exigencia para restablecer el servicio “no fue debidamente cumplida” y le dio un plazo de cinco días para consignar nuevos documentos.
También ordenó a X pagar una multa de al menos cinco millones de reales diarios, equivalente a 913 mil dólares, por haber violado la suspensión la semana pasada.
El miércoles pasado la red social volvió a estar ampliamente accesible en Brasil gracias a una maniobra técnica que le permitió eludir el bloqueo. A día siguiente dejó de funcionar de nuevo, tras acatar una orden de la justicia.
X hizo hincapié en que ese prolongamiento temporal fue la consecuencia “involuntaria” de un cambio de servidor, pero Moraes consideró que existía una intencionalidad “maliciosa, ilícita y persistente de la plataforma X” de ceder a la justicia.
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