El Banco de Inglaterra elevó su tasa de referencia en medio punto porcentual, hasta el 4 por ciento, el mayor nivel desde hace 15 años, cuando en el 2008 tomaron una medida similar para constrrarestar los efectos de la crisis económica global.
Al tomar esta medida, la principal banca de Inglaterra se resisite a adoptar las medidas impulsadas por la Reserva Federal de los Estados Unidos y así, suavizar su respuesta a la crisis.
Si hay pruebas de presiones [inflacionistas] persistentes, entonces sería necesario un mayor endurecimiento de la política monetaria”, declaró el Banco de Inglaterra.
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La central financiera ha aprobado cuatro subidas consecutivas de medio punto o más desde que la invasión rusa de Ucrania provocó fuertes subidas en los precios de los alimentos y la energía.
“Ya hemos hecho mucho con las tasas… pero todavía es demasiado pronto para declarar la victoria […] Las presiones inflacionarias siguen ahí… y debemos estar absolutamente seguros de que realmente estamos dando un giro a la inflación”, indicó Andrew Bailey, gobernador del banco, a través de una conferencia de prensa.
