Al menos 12 mujeres y siete hombres con vínculos políticos, laborales e incluso familiares con el partido Morena o la coalición gobernante figuran entre los finalistas del proceso de designación de la consejera presidenta del Instituto Nacional Electoral (INE) y tres consejerías más.
Ayer concluyeron las entrevistas correspondientes al proceso de designación realizadas por el Comité Técnico de Evaluación con las 46 mujeres y los 46 hombres quienes se perfilan para obtener uno de los puestos que quedarán vacantes en el organismo electoral próximamente.
Se estima que el próximo viernes 24 de marzo, la lista de las y los aspirantes mejor calificados en las entrevistas sea revelada por el Comité y apenas dos días después, el domingo 26, se entregue a la Junta de Coordinación Política (Jucopo) de la Cámara de Diputados las cuatro quintetas; es decir, cinco nombres por cada una de las cuatro vacantes, incluida una exclusiva para la presidencia del Consejo General que, según sentencia del Tribunal Electoral, deberá ser solo de mujeres.
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Tras realizar este proceso, la Jucopo tendrá que seleccionar un nombre, para que al pleno sean propuestos candidatos con un acuerdo plural.
Si el pleno no aprueba las propuestas efectuadas por la coordinación de la Jucopo con mayoría calificada, (dos terceras partes de los legisladores presentes) se realizará un sorteo con un nombre de cada quinteta, primero en la propia Cámara y, de no ser posible llevar a cabo ahí la insaculación, esta se llevaría a cabo en la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
En el caso de que el partido Morena y sus aliados deseen colocar a alguien en específico en la presidencia del INE, para el periodo 2023-2032, tendrán que entablar negociaciones con la oposición.
De no ser así, la suerte será quien decida el destino del puesto presidencial del INE.
