Según un estudio de Trovit, uno de los portales referencia a nivel global en lo que respecta a búsqueda de inmuebles, alquilar una propiedad por 30 días en la CDMX por medio de Airbnb sale, en promedio y con el precio establecido por los propietarios de la aplicación, 57 por ciento más caro que la forma tradicional.
De las 135 colonias que conforman la capital del país, 92 por ciento de estas tenían un costo mayor en la renta de departamentos a través de Airbnb.
Entre los principales motivos del incremento está la migración de nómadas digitales, quienes han acelerado la demanda de renta a corto y mediano plazo, un hecho que Airbnb capitaliza de manera sencilla gracias a su modelo de negocio.
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En su estudio, Trovit explicó que ambos métodos tienen modelos de negocio distintos: “En el mercado tradicional, los contratos de renta suelen escriturarse a un año y están regidos por diferentes artículos del Código Civil Federal. Quien renta una vivienda de esta forma, lo hace para convertirla en su hogar”.
En contraparte, Airbnb aprovecha su esquema de “vivienda turística”, a través de la cual ofrecen estancias cortas y de manera accesible a quienes la necesitan.
Aunque su giro de mercado sí cubre una necesidad latente a nivel turístico y económico, su ingreso al mercado de distintas ciudades ha perjudicado al mercado tradicional de alquileres, por lo que gobiernos de ciudades cosmopolitas como Nueva York y Barcelona se han visto obligados a reglamentar de manera mucha más estricta los mercados.
“El modelo de Airbnb llama la atención de muchos inversionistas, propietarios y caseros, quienes se plantean dejar de rentar sus inmuebles bajo las condiciones de un contrato convencional. Pero, también preocupa a muchos ciudadanos por el impacto que tiene en la cantidad de viviendas disponibles para rentar y en su precio”, aseguró Trovit.
