Autos troyanos: Estados Unidos teme a ciberataques chinos en vehículos eléctricos

La Casa Blanca ha emitido un plan para restringir la importación y venta de vehículos eléctricos que contengan componentes de hardware y software fabricados en China o Rusia, argumentando preocupaciones de seguridad nacional. Esta medida surge debido a los crecientes temores de ciberataques chinos a través de lo que se ha denominado “autos troyanos”.

El gobierno estadounidense teme que estos vehículos puedan ser utilizados para sabotaje remoto, comprometiendo la infraestructura crítica de Estados Unidos.

Preocupaciones de seguridad en vehículos eléctricos conectados

El riesgo de ciberataques chinos en vehículos eléctricos ha sido uno de los principales motivos de preocupación para las autoridades estadounidenses.

La Casa Blanca ha señalado que los componentes de software y hardware de origen chino, presentes en estos automóviles, podrían ser utilizados para acceder y manipular información sensible o incluso controlar de manera remota los vehículos conectados.

Esta vulnerabilidad no solo pone en riesgo la seguridad de los conductores, sino también la infraestructura crítica del país.

El Departamento de Comercio de Estados Unidos explicó que la posibilidad de manipulación malintencionada de estos sistemas es una amenaza real.

La tecnología utilizada en los vehículos eléctricos conectados permite que hackers puedan interceptar datos transmitidos, controlar remotamente el sistema de conducción o sabotear los vehículos eléctricos.

Según Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional, la amenaza de los ciberataques chinos está latente, especialmente en un contexto de tensiones geopolíticas con China y Rusia.

Además, se ha mencionado que los grupos de piratas informáticos chinos, como Volt Typhoon, ya han realizado ciberataques en sectores clave de Estados Unidos, como transporte y energía, lo que incrementa las alarmas sobre la seguridad de los vehículos eléctricos conectados.

Te podría interesar:  Elon Musk ‘frena’ construcción de Planta de Tesla en Monterrey

La respuesta de Estados Unidos ante el riesgo de autos troyanos

Para contrarrestar el riesgo de ciberataques chinos a través de vehículos eléctricos, Estados Unidos ha propuesto implementar prohibiciones graduales que comenzarán en 2027 para el software y en 2030 para el hardware.

Esto afectará principalmente a los componentes fabricados en China y, en menor medida, en Rusia; sin embargo, se reconoce que eliminar completamente la dependencia de los componentes chinos es una tarea compleja debido a la interconexión de las cadenas de suministro globales.

Expertos en ciberseguridad han destacado que los vehículos eléctricos conectados pueden convertirse en objetivos de ataques debido a su conectividad con redes externas y a los sistemas de conducción autónoma que utilizan.

En Estados Unidos preocupa que los hackers chinos o rusos puedan explotar las puertas traseras de los vehículos, aunque la industria automotriz china es la más afectada por esta prohibición.

El anuncio de la Casa Blanca también podría estar motivado por razones políticas y económicas.

La Ley de Chips y Ciencia de 2022, destinada a fortalecer la fabricación tecnológica estadounidense, es un claro indicativo de que el país busca reducir su dependencia de las tecnologías extranjeras, especialmente de China.

A medida que se acercan las elecciones presidenciales, esta prohibición puede interpretarse como una estrategia para consolidar el apoyo de los votantes y enviar un mensaje contundente de que Estados Unidos no cederá ante las crecientes tensiones con China.

Más información relevante aquí.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *