Creada por Joey Brumm y estrenada en 2018 en Australia, la serie “Bluey” ha alcanzado niveles sorprendentes de popularidad desde su lanzamiento en Disney+; inspirada en la experiencia personal de Brumm como padre, “Bluey” se ha posicionado como una de las mejores producciones de televisión infantil de los últimos años.
A diferencia de otros programas, “Bluey” no se limita a entretener a los más pequeños, sino que también se propone conectar con los adultos, explorando los desafíos y alegrías de la paternidad moderna.
El enfoque innovador de Brumm se percibe en cada episodio, donde se reflejan las complejidades de ser una figura de autoridad, pero también un compañero de juego comprometido.
Bluey’s now the No.1 most watched show (of all shows) in America for 2024. How incredible. With 35 billion minutes watched this year. 💙🇦🇺 🇺🇸 #bluey pic.twitter.com/yTgg5WMqs8
— Daley Pearson (@Daley_Pearson) September 8, 2024
Una fórmula de éxito: humor, empatía y una animación única
El atractivo de “Bluey” se debe, en gran parte, a la habilidad de Joey Brumm para crear situaciones cotidianas con las que tanto padres como hijos pueden identificarse. La serie explora temas como el juego, la imaginación y las relaciones familiares de una manera auténtica y reflexiva.
En una entrevista con The Vulture, Joe Brumm explicó cómo percibía que la mayoría de la televisión infantil seguía una fórmula repetitiva, con historias predecibles y personajes poco desarrollados.
En “Bluey”, se abordó una narrativa más compleja y realista, en la que los personajes no siguen guiones predecibles. “No habíamos visto nada similar antes”, declaró Henrietta Hurford-Jones, directora de contenido infantil de BBC Studios, al hablar del impacto inicial de “Bluey” en la audiencia global.
La animación de “Bluey” también juega un papel crucial en su éxito. Diseñada por Rich Jeffery y con música de Joff Bush, la serie presenta una estética visualmente atractiva, caracterizada por colores pastel y detalles minuciosos que resaltan su singularidad.
La serie combina elementos de la cultura australiana con un humor sutil y situaciones familiares. Por ejemplo, en el episodio “A dormir” (Temporada 2, episodio 9), Bingo, la hermana menor de Bluey, vive una fantástica aventura onírica mientras intenta permanecer en su cama toda la noche.
Este tipo de relatos, que entrelazan la fantasía con la realidad, atraen a un público más amplio, creando una experiencia compartida entre padres e hijos.
BREAKING NEWS: #Bluey Sleepytime just received a 55 minute standing ovation from the kiddos in your living room after watching it for the 200th time. pic.twitter.com/Fz2yjFWhuJ
— Official Bluey TV (@OfficialBlueyTV) September 8, 2024
“Bluey”: Un fenómeno global de la televisión infantil
La rápida expansión internacional de “Bluey” se debe, en gran medida, a su llegada a Disney+ y Disney Junior en Estados Unidos, donde logró cautivar a 16 millones de espectadores en el último trimestre de 2019. Además, la serie ha sido aclamada por la crítica, obteniendo varios premios, incluido un Emmy.
La colaboración con grandes talentos como Rich Jeffery y Joff Bush, así como el respaldo de Disney, han sido fundamentales para su consolidación en el mercado global.
El éxito de “Bluey” también refleja un enfoque innovador hacia la televisión infantil, uno en el que los padres y los niños pueden disfrutar juntos.
La serie ha demostrado que los programas de televisión infantil pueden ofrecer contenido de calidad y valor, fomentando un ambiente de aprendizaje, diversión y reflexión en el hogar.
Con su combinación única de humor, empatía y creatividad, “Bluey” ha logrado convertirse en un referente indiscutible en el mundo de la televisión infantil, y su popularidad sigue en ascenso gracias a su disponibilidad en plataformas como Disney+.
Así, “Bluey” no es solo una serie para los más pequeños, sino también una invitación para que los adultos se unan al mundo de la imaginación y el juego, recordándoles que nunca se es demasiado viejo para disfrutar de una buena historia.
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