Durante la noche del pasado domingo 4 de agosto, la bóveda de un cenote ubicado en la comunidad maya de Xocén, en el municipio yucateco de Valladolid, colapsó y dejó en su lugar un impresionante socavón de 25 metros de diámetro.
El suceso devoró por completo a un gigantesco árbol de ceiba, el cual tenía más de 100 años. Aunque no se conocen los motivos del derrumbe, ninguna persona resultó herida.
Tras acudir al lugar de los hechos, Alfredo Fernández Arceo, el alcalde de Valladolid, dijo que causas naturales provocaron el agujero:
“Estoy ubicado en el centro del mundo, en Xocén. Nos llegó un aviso de que se había caído el ‘techo’ del cenote, el cual está a una cuadra del centro del pueblo. También un ceibo resultó afectado, en fin, son cosas de la naturaleza y no podemos hacer nada”, declaró Fernández Arceo.
¿Qué provocó el colapso de la bóveda del cenote?
Después de recibir múltiples reportes de lo sucedido, elementos de Protección Civil estatal, bomberos del municipio, policía municipal y estatal, acudieron al lugar de los hechos para resguardar la integridad física de los habitantes. Cabe destacar que ningún civil, ni propiedad, recibieron daño alguno.
Una vez que se acordó el sector afectado, se llevaron a cabo las pruebas, donde se determinó que, de forma preliminar, este enorme socavón tiene un tamaño aproximado de 20 metros y 15 metros de profundidad.
Asimismo, detallaron que la magnitud de este agujero fue mayor debido a que, durante el hundimiento, un árbol de ceiba, de aproximadamente 15 metros de alto y de más de 100 años, colapsó, lo que provocó que el socavón fuera más severo.
Los representantes de Protección Civil continúan con las pruebas para determinar el peligro que podría ocasionar a las personas que se encuentran cercanas a este imponente hundimiento, por lo que señalaron a los habitantes de la zona para evitar cualquier tipo de amenaza.
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