La categoría del automovilismo, Super Fórmula está por celebrar su 50° aniversario y con este motivo la competencia japonesa estrenará monoplaza con el Dallara SF23, un auto que va a contracorriente respecto al resto de las categorías a nivel mundial.

Con una inspiración bastante clara en la categoría de monoplazas de la Unión Americana, la IndyCar, la Super Fórmula basará su monoplaza de competencias en un chasis único (el Dallara SF23), con carga aerodinámica limitada y dos motores de elección: Honda o Toyota.

Los promotores de la competencias resaltaron dos requisitos para el nuevo modelo del Dallara: disminuir el downforce ya hacer que los coches fueran lo más sostenibles posible; mismo que ayude a la innovación de la categoría a acercarse al concepto ‘carbón neutral’.

En cuanto a la disminución de la ‘downforce’, se eligió este camino por dos razones: potenciar las cualidades de pilotaje y facilitar los adelantamientos.

Para ello se ha modificado alerones y pontones de forma que la carga aerodinámica disminuye un 8%, que no es mucho, pero por el contrario las turbulencias o ‘aire sucio’ que genera y que tanto dificulta seguir al coche precedente han disminuido en un 50%.

La carrocería del Dallara SF23 no recurre a la fibra de carbono sino a un material biocompuesto denominado ‘B-Comp1’ en el que se usan fibras de lino y de cáñamo (caña de azúcar) así como fibra de carbono reciclada, sin perjuicio de la rigidez torsional del conjunto ni aumento de peso del conjunto.

De esta manera, se permite el ahorro en hasta un 70% de las emisiones en el proceso de fabricación del monoplaza; ya que la sostenibilidad neta pasa por algo ajeno al auto: la gasolina y los neumáticos.

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Respecto a las gomas, la marca Yokohama desarrolló neumáticos a base de materias primas renovables, además de compuestos sostenibles de origen natural y materiales reciclados al 33%.

Finalmente, el combustible es asimismo específico, sostenible, elegido tras múltiples ensayos y de acuerdo con los motoristas, de forma que los propulsores Honda y Toyota, 4 cilindros turbo, ofrecen una potencia de 550 CV.

Con estas novedades, el SF23 marca una tendencia que seguro será seguida por otras categorías monomarca en el futuro.

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