Draymond Green ha sido suspendido para el tercer partido de la serie de primera ronda entre los Golden State Warriors y los Sacramento Kings, anunció la NBA el martes por la noche. El comunicado de la liga añadía que la suspensión estaba “basada en parte en el historial de actos antideportivos de Green”. Shams Charania de The Athletic informó inicialmente que era poco probable que Green fuera suspendido, pero que se esperaba que Green fuera multado. 

 

La suspensión es el resultado de un incidente que tuvo lugar en el cuarto cuarto del segundo partido del lunes entre los Warriors y los Kings. Tras una canasta fallida de Malik Monk, el pívot de los Kings Domantas Sabonis agarró la pierna de Green y, en respuesta, éste le dio un pisotón en el pecho. Fue expulsado inmediatamente del partido, mientras que Sabonis recibió una falta flagrante-1.

 

No es la primera vez que Green es sancionado en la postemporada. Fue suspendido de forma infame durante las Finales de la NBA de 2016, cuando Green recibió una falta flagrante-1 al final del cuarto partido por golpear a LeBron James en la ingle. Ese fue su tercer punto de falta flagrante de la postemporada, lo que desencadenó una suspensión automática para el Juego 5 de las Finales. Los Warriors perdieron ese partido y, en última instancia, la serie.

 

Fue suspendido en marzo de esta temporada tras cometer su 16ª falta técnica, que provoca una suspensión automática de un partido. Green también fue expulsado del primer partido de la serie de Golden State contra los Memphis Grizzlies la temporada pasada tras cometer una falta sobre Brandon Clarke en un intento de bandeja. Ha cometido 12 faltas en partidos de playoffs a lo largo de su carrera.

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Esta ha sido una temporada polémica para Green. Comenzó cuando propinó un puñetazo a su compañero Jordan Poole en el campo de entrenamiento y tuvo que pedir la baja del equipo. Se dice que Green, que puede convertirse en agente libre esta temporada baja, está buscando una ampliación de contrato a largo plazo con los Warriors. Poole recibió una extensión de cuatro años que podría valer hasta 140 millones de dólares. Irónicamente, antes de que comenzara la postemporada, Green señaló a los Kings como su rival preferido en la primera ronda, aunque citó el corto trayecto entre San Francisco y Sacramento como razón para ello.

 

Los Kings lideran ahora la serie por 2-0 y, con la baja de Green, los Warriors tienen ante sí una cuesta arriba. Green es un futuro miembro del Salón de la Fama y una parte fundamental del tramo más exitoso en la historia de los Warriors, pero dada su edad, limitaciones estilísticas, demandas contractuales y una serie de controversias, ahora vale la pena preguntarse si el Juego 4 podría ser su último partido en casa como miembro de los Warriors.

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