La economía mexicana ha iniciado la segunda mitad de 2024 con un retroceso significativo, marcado por una contracción del Indicador Oportuno de la Actividad Económica (IOAE), el cual es calculado por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
Durante el mes de julio, se registró una disminución de 0.13%, rompiendo con la tendencia alcista que se había observado en los dos meses anteriores.
Este retroceso es el tercero en lo que va del año, lo que genera preocupación respecto al comportamiento de la economía mexicana en la segunda mitad de 2024.
En julio 2024, el Indicador Oportuno de la Actividad Económica #IOAE estima un aumento anual de 1.1 % en el Indicador Global de la Actividad Económica #IGAE.
Por actividad, las variaciones anuales esperadas son las siguientes:
⬆️ 0.1%, secundarias
⬆️ 1.6%, terciarias— INEGI INFORMA (@INEGI_INFORMA) August 19, 2024
Impacto en actividades secundarias y terciarias
El descenso observado en julio se ha visto reflejado tanto en las actividades secundarias como en las terciarias. Las actividades secundarias, que incluyen la producción industrial de la economía mexicana, cayeron un 0.15%.
Este descenso se atribuye en gran medida a la debilidad persistente en la manufactura de Estados Unidos, país que es el principal socio comercial y demandante de productos industriales de México.
La economía mexicana ha estado estrechamente vinculada a la salud de la economía estadounidense, por lo que cualquier fluctuación en la demanda de manufacturas en Estados Unidos tiene un impacto directo en la actividad industrial mexicana.
Por otro lado, las actividades terciarias, que reflejan el consumo de los hogares, también experimentaron una contracción del 0.15% en julio, marcando la segunda disminución consecutiva en este sector.
Este comportamiento se ha visto influenciado por un repunte en la inflación, que se situó en 5.57% anual en julio de 2024, así como por las altas tasas de interés que aún persisten, a pesar del reciente recorte del Banco de México que ubicó la tasa en 10.75%.
Estas condiciones han reducido el poder adquisitivo de los consumidores y han limitado el crecimiento del consumo interno, lo que ha impactado negativamente la economía mexicana.
Perspectivas para la segunda mitad de 2024
A pesar de la contracción mensual, el IOAE mostró un crecimiento anual del 1.1% en julio de 2024, lo que representa el nivel más bajo en los últimos tres meses.
En términos acumulados, de enero a julio, la economía mexicana ha registrado un crecimiento del 1.7%, un dato que sugiere una desaceleración en comparación con el desempeño observado en el mismo período del año anterior.
El comportamiento de la economía mexicana en la segunda mitad de 2024 estará condicionado por varios factores, incluyendo la evolución de la inflación, las decisiones de política monetaria del Banco de México y el desempeño de la economía estadounidense.
Los analistas advierten que, de continuar las tendencias actuales, la economía mexicana podría enfrentar desafíos significativos en su intento por mantener un crecimiento sostenido durante lo que resta del año.
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