El Super Bowl, que bien podría considerarse como una marca registrada, como uno de los eventos deportivos más importantes del planeta, les da a los organizadores y a la misma NFL para colocarlo también como el más lucrativo, comercialmente hablando.
Y es que agregado a todo lo que genera el juego, en lo deportivo, que para esta ocasión enfrentará en su edición LVII a los Campeones de la Conferencia Nacional (NFC), Philadelphia Eagles, en contra de los Kansas City Chiefs, monarcas de la Conferencia Americana (AFC), está la competencia por la marca que lanza el comercial más original o espectacular.
Incluso, uno de los máximos atletas que tiene México en la actualidad, el boxeador, Multicampeón de los Pesos Supermedianos , Saúl “Canelo” Álvarez, es protagonista de una de las piezas que se lanzarán durante los cortes del llamado Juego Grande, arriba de un carrito de golf, su otra gran pasión además del pugilismo.
Y es tanta la demanda para obtener un espacio para la Final de la Liga de fútbol americano, que éstos llegan a tener costos estratosféricos, aun cuando los tiempos sean pequeños o como un suspiro, y esa es la otra gran ganancia que genera el partido por excelencia del deporte de los Estados Unidos, agregado a las que dejan las entradas, la venta de souvenirs, la comida el día del encuentro, los derechos de televisión, etcétera.
Para el próximo 12 de febrero, en Glendale, Arizona, en el State Farm Stadium, casa los Cardinals, durante el enfrentamiento entre Águilas y Jefes, los costos de un comercial de 30 segundos en televisión oscilan los 7 millones de dólares , según apunta la revista AdAge, lo que a su vez es un récord que batirá este año la NFL. Anteriormente, el promedio era entre 6 y 6.5 mdd, cuando la transmisión era emitida por NBC, lo que pudo ser un factor determinante en el precio.
