Este viernes, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) informó que los precios de los alimentos a nivel mundial experimentaron un leve incremento en julio por segunda vez en el presente año.
Esta alza, que alcanzó un 1.3% con respecto a junio, representa el mayor aumento en lo que va del año. No obstante, es importante destacar que el índice se sitúa un 11.8% por debajo del nivel registrado en el mismo período del año anterior.
Uno de los factores que contribuyó significativamente a este aumento fue el fin del acuerdo para la exportación de granos ucranianos en el mar Negro.
La FAO señaló que la incertidumbre en los suministros de la región del mar Negro, tras la decisión de Rusia de no prolongar el acuerdo, generó un incremento del 12.1% en el índice de precios de los aceites vegetales, poniendo fin a siete meses de declive.
Asimismo, los precios del trigo experimentaron un aumento del 1.6%, marcando su primer incremento en nueve meses.
Esta tendencia se debe en gran parte a la situación en torno a las exportaciones de Ucrania, que se vio afectada por la finalización del acuerdo mencionado.
En cuanto al arroz, su índice de precios registró un incremento del 2.8%, alcanzando su máximo en doce meses según los precios corrientes; la principal causa de este aumento es la prohibición impuesta por India el 20 de julio a las exportaciones de arroz índico sin cocción previa.
Por otro lado, el precio del azúcar experimentó una disminución del 3.9% en su segundo mes consecutivo de caída.
El informe de la FAO también resalta que los precios internacionales del maíz continuaron su tendencia a la baja debido al aumento estacional de los suministros procedentes de las cosechas en curso en Argentina y Brasil.
En conclusión, el panorama de los precios de los alimentos a nivel mundial se ha visto influenciado por diversos factores, especialmente el fin del acuerdo de exportación de granos ucranianos en el mar Negro, lo que ha generado una ligera alza en los mismos.
