Felipe Massa regresó a los reflectores para declarar que estudiará si se pueden emprender acciones legales para revertir el resultado del GP de Singapur de 2008; con el fin de que se le declare campeón de la Fórmula 1 de esa temporada, palabras que hace pocos meses ya dijo exactamente lo mismo.
Quince años después de los sucesos, parece muy improbable que logre su pretensión y este deseo viene después de que Bernie Ecclestone, reconoció que debían haber anulado el título de Hamilton de 2008 por lo ocurrido en el polémico GP de Singapur de F1 de aquel año, Felipe podría pedir la anulación de los resultados de esa carrera y la corona.
Cabe preguntarse por qué habla de esto ahora, cuando el tema se conoce desde 2009. Massa se basa en que las declaraciones de Bernie, que dijo que lo sabían desde 2008 –posiblemente antes de que los resultados del Mundial fueran oficiales– y no se hizo nada “para no manchar el deporte”, aportan una nueva luz al tema, que a priori debería estar prescrito.
Cabe recordar que en su día ya fueron juzgados por la autoridad deportiva, lo que costó severas sanciones a Flavio Briatore, Pat Symonds; entre otros más, sanciones que fueron anuladas por la justicia francesa, que condenó a la FIA, al menos en el caso de Flavio, a pagar una indemnización.
Bernie dejó claro que, según los estatutos de la competición, la carrera de Singapur 2008 debió ser anulada junto a sus resultados y no debió contabilizar para el Mundial, por lo que dejó claro que el título de aquel curso debería haber sido para Massa y no para Hamilton.
“En primer lugar, es muy triste descubrir que una carrera fue un robo. Eso quedó claro al año siguiente. Hubo castigos para Briatore y Pat Symonds, mientras que con el resultado de algo que fue robado, no pasó nada”, denunció el brasileño en ‘Motorsport.com’.
“Hay una norma que decía que cuando se decidía un campeonato, a partir del momento en que el piloto recibía el trofeo de campeón, ya no se podían cambiar las cosas. Pero se demostró que hubo un robo. En su momento, los abogados de Ferrari me hablaron de esa norma, acudimos a otros abogados y la respuesta fue que no se podía hacer nada. Yo, lógicamente, me creí esa situación”, aclaró Felipe, explicando los motivos por lo que no pidió la anulación de aquel resultado. Pero todo cambia después de que Bernie Ecclestone asegurase que estaba al corriente de lo ocurrido.
“Y después de 15 años, escuchamos que el entonces dueño de la categoría habla de que lo sabía en 2008, junto con el presidente de la FIA, y no hicieron nada para no ensuciar el nombre de la F1. Esto es muy triste. Saber que te robaron algo, que el resultado de esa carrera debía ser anulado y yo tendría un título. Al final, el mayor perdedor con ese resultado fui yo. Vamos más allá para entender todo esto”, agregó.
