En un hito histórico, Francia se convierte en el primer país en inscribir el derecho al aborto en su Constitución, marcando un compromiso “irreversible” con la libertad reproductiva de las mujeres.
La consagración de este derecho tendrá lugar en el prestigioso Palacio de Versalles, casi 50 años después de la despenalización del aborto en el país.
El primer ministro, Gabriel Attal, destacó la importancia de esta medida, subrayando que mientras los derechos de las mujeres son amenazados en todo el mundo, Francia se sitúa a la vanguardia del humanismo.
La decisión responde a la necesidad de proteger este derecho en un contexto global donde algunas naciones han restringido la posibilidad del aborto.
A pesar de contar con un amplio apoyo social en Francia desde su despenalización hace casi medio siglo, la preocupación se intensificó tras la decisión de la Corte Suprema de Estados Unidos en 2022 de dejar de reconocer el aborto como un derecho federal.
Este evento desencadenó un extenso proceso legislativo, respaldado tanto por la oposición de izquierda como por el oficialismo, culminando en un Congreso extraordinario que se llevará a cabo el lunes.
La ceremonia de consagración se realizará en la ilustre sala del Congreso en el Palacio de Versalles y busca hacer “irreversible” el derecho al aborto en la Constitución francesa, según expresó el presidente Emmanuel Macron.
La inscripción requiere el respaldo de tres quintas partes de los legisladores presentes, y hasta el momento, 760 de los 925 diputados y senadores ya han expresado su apoyo.
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Este paso de Francia resuena internacionalmente y envía un mensaje fuerte en un momento en que otros países han restringido derechos reproductivos.
Chile intentó incluir el derecho al aborto en su nueva Constitución en 2022, pero fue rechazado en referendo.
Varios países de los Balcanes tienen protección implícita, y algunos países africanos mencionan derechos reproductivos de manera indirecta en sus Constituciones.
Por otro lado, hay naciones que prohíben el aborto constitucionalmente, enfatizando el derecho a la vida desde la concepción.
Francia, con esta acción, destaca su compromiso con la autonomía y libertad de las mujeres en un contexto global que sigue debatiendo este crucial derecho.
