La sugerencia es fuerte y resurge como un río kárstico cada vez que Lewis Hamilton está cerca de la expiración de su contrato con Mercedes AMG Petronas; la yuxtaposición entre el siete veces campeón del mundo y Ferrari ya se ha sentido en varias ocasiones en los últimos años y sigue siendo actual incluso ahora.
El Daily Mail publicó ayer la noticia de que el piloto habría recibido una oferta de John Elkann, presidente de la Scuderia di Maranello, y que la cantidad estaría en el orden de los 45 millones de euros al año.
¿Una forma de tentar al campeón, ahora cerca de las últimas temporadas de su increíble carrera o una indiscreción filtrada con un momento sospechoso justo cuando Hamilton está discutiendo una renovación con Mercedes, a la que está vinculado en la F1 desde 2013?
Tal vez ambos.
PONER Y LIBERAR HAMILTON
El contacto aparentemente tendría un fundamento de verdad, aunque no hay confirmaciones sobre las cifras y alguien pudo haber tenido interés en que el asunto se filtrara en un momento delicado de las negociaciones con Toto Wolff.
Quien no ocultó la criticidad de ciertos detalles del contrato, al tiempo que reiteró la creencia de que Lewis finalmente firmará; mientras que Hamilton ha reiterado a menudo este año que quiere quedarse con Mercedes, pero está dispuesto a arrebatarle una renovación de dos años en las mejores condiciones económicas.
El tira y afloja entre Lewis y Toto no es nuevo, amigos en la vida, aliados en las carreras y al mismo tiempo negociadores muy duros cuando se sientan a la mesa. Ya había ocurrido en 2019, y ya entonces apareció la sombra de Elkann, que se reunió a escondidas en dos ocasiones con Hamilton para convencerle de que se marchara a Maranello.
Al final, Lewis decidió quedarse en Mercedes con un acuerdo de última hora a principios de 2020 y solo por la temporada actual.
LAS CONDICIONES DE HAMILTON
El contrato actual, firmado en el verano de 2020, prevé un compromiso de tres años de alrededor de 40 millones y la máxima libertad para Hamilton en la gestión comercial de su imagen.
Un factor no secundario en la elección, dado que Lewis hoy es una empresa viva con ramificaciones en moda, accesorios de estilo de vida y muchos otros campos de la industria.
Por no hablar de su actividad con la fundación Misión 44, que lucha por dar mayores oportunidades a quienes proceden de contextos sociales desfavorecidos y cuenta con el apoyo, también económico, de numerosos socios patrocinadores, entre ellos Mercedes.
Todos elementos en contra de la hipótesis de Ferrari, porque el Cavallino no se dedica a actividades similares y suele gestionar los derechos de imagen de los pilotos con lógica corporativa.
HAMILTON Y LECLERC
Entonces, ¿por qué la escudería roja buscaría a Hamilton y por qué podría tentar a Hamilton?
Las respuestas a la primera pregunta son muchas. El fichaje de Lewis podría revivir la tradición de los campeones del mundo que aterrizaron en Maranello y desviar la atención del infeliz momento histórico de la roja en cuanto a resultados en la F1.
Además, habría una razón estratégica ligada a que Ferrari está negociando la renovación del contrato con Charles Leclerc, que vence a finales de 2024.
Las discusiones están actualmente en standby, porque las prestaciones del coche no convencen al monegasco desde un punto de vista perspectivas de futuro, y el hecho de que el equipo haya estado buscando a Hamilton podría presionarlo.
Al mismo tiempo, Ferrari debe protegerse en caso de que Charles decida no ir más allá de la fecha límite, contratando a un súper piloto. ¿Y quién mejor que Hamilton? El siete veces campeón del mundo, de llegar, se incorporaría a Leclerc en 2024, ocupando el lugar de Carlos Sainz, que deberá buscar otro asiento (¿Mercedes? ¿Sauber-Audi?).
De hecho, Leclerc pretende respetar el contrato actual y es considerado inamovible por Elkann, quien le prometió una renovación a largo plazo con la perspectiva de ser el líder del equipo en la pista, mientras la confianza en el español es menor.
El hecho de que ambos pilotos de Ferrari aún tengan un año de contrato complica la operación de Hamilton.
Pero Ferrari no puede esperar, ya que Lewis, de 38 años, está en las últimas temporadas de su carrera.
Ciertamente, tener a su lado a un compañero como Hamilton sería un estímulo y a la vez un elemento desestabilizador para Leclerc, teniendo en cuenta la diferencia de trato económico que tendrían (el monegasco gana en torno a los 20 millones al año).
