La Casa del Dragón: Llegaron los nuevos jinetes de dragones

La segunda temporada de La Casa del Dragón se prepara para la recta final de la guerra conocida como la Danza de los Dragones; bajo la dirección de Andrij Parekh, quien ha trabajado en Succession, este episodio ha resaltado por acción en las intrincadas tramas y la intensidad de los diálogos, recordando a Juego de Tronos en sus mejores momentos.

El rey Aegon ha despertado en un estado lamentable, apenas recuperándose del fuego de dragón. Lord Larys Strong se ha encargado de recordarle que su supervivencia ya le ha asegurado un lugar en la historia.

Sin embargo, Aemond no está dispuesto a dejar las cosas así y prefiere que Otto Hightower retome su puesto como Mano del Rey, lo cual complica aún más las intrigas palaciegas.

Por otro lado, Alicent ha reconectado con su hermano Gwayne antes de que él y Ser Criston Cole regresen al campo de batalla. A pesar de estos reencuentros, los ciudadanos de Desembarco del Rey, hambrientos y enfurecidos, han comenzado a mostrar su descontento hacia la realeza. Este acto es un presagio de una posible revuelta más seria.

Mi reino por un jinete

Mientras tanto, en el bando de los Negros, Rhaenyra está recuperando su autoridad. En un momento decisivo, le ha dado un bofetón a Lord Bartimos por cuestionar sus decisiones, reafirmando su posición de poder.

No obstante, su plan de encontrar nuevos jinetes Targaryen no ha tenido el éxito esperado. Ser Steffon Darklyn ha perecido mientras intentaba domar a Bruma (Seasmoke), un dragón que aún busca un jinete digno.

El plan de Rhaenyra no ha prometido mucho hasta ahora, pero los espectadores atentos notarán que otros posibles candidatos a jinetes están apareciendo. Alyn y Addam, dos marineros bastardos, han emergido como figuras de interés.

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Alyn ha salvado la vida de Lord Corlys Velaryon, y ahora forma parte de su flota, mientras que Addam parece tener un futuro prometedor en este embrollo.

Este episodio de La Casa del Dragón ha mostrado que la relación crucial entre Rhaenyra y Mysaria ha sido destacada.
Mysaria ha demostrado ser una aliada valiosa, ayudando a fomentar el descontento entre el pueblo de Desembarco del Rey debido al bloqueo comercial impuesto por Corlys Velaryon.

En un momento de vulnerabilidad, Mysaria ha compartido con Rhaenyra su traumática historia de abuso, profundizando la conexión emocional entre ambas.

El clímax emocional de este vínculo se ha alcanzado cuando Rhaenyra y Mysaria se han besado. Sin embargo, su intimidad ha sido interrumpida por noticias urgentes sobre Bruma, el dragón que había escapado. Rhaenyra ha partido de inmediato a lomos de Syrax para investigar, lo que ha dejado a los espectadores intrigados sobre el desenlace.

La reaparición de Viserys en La Casa del Dragón

En otras partes de Poniente, Daemon ha continuado enfrentándose a sus propios demonios en Harrenhal, teniendo alucinaciones que han permitido a los responsables de La Casa del Dragón traer de vuelta a personajes queridos de la temporada anterior.

Paddy Considine ha destacado al aparecer como Viserys en estas visiones, aunque esto ha perturbado a Daemon.

El conflicto en las Tierras de los Ríos también ha evolucionado, con la muerte de Lord Grover Tully y la ascensión de su heredero, Lord Oscar Tully, quien ha declarado su lealtad a Rhaenyra; este apoyo ha fortalecido la posición de los Negros, permitiéndoles avanzar con mayor seguridad.

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Con la llegada de los Lannister a Colmillo Dorado y la preparación de Aemond para unirse a ellos con Vhagar, el escenario está listo para un enfrentamiento épico.

La introducción de nuevos jinetes de dragones y las intrigas palaciegas continúan consolidando esta serie como una digna sucesora de Juego de Tronos, prometiendo más emociones y drama en los episodios finales de la segunda temporada.

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