La vida como un Laker no ha sido del todo fácil para LeBron James. Más allá de haber conseguido el título del 2020 con la franquicia oro y púrpura, su etapa como parte del equipo más importante de la NBA ha sido sumamente complicada.
El día de ayer los Ángeles Lakers vencieron al Jazz de Utah 128 a 117 y se afianzaron en la séptima posición de la conferencia del oeste. Dicha posición le asegura tener hasta 2 oportunidades, en caso de ser necesario, para clasificar a la siguiente ronda de la postemporada mediante el torneo de Play – in.
Si todo marcha de acuerdo a la lógica, los Ángeles Lakers estarán avanzando a la siguiente ronda y enfrentando a los Grizzlies o a los Nuggets en la primera ronda de los playoffs. Esto significaría el regreso de los Lakers a dicha etapa tras un año de espera.
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La temporada pasada fue simplemente desastrosa para los de California. Entre las lesiones, el bajo nivel y las malas decisiones administrativas, los Lakers quedaron fuera de los playoffs, lo cual significo la segunda temporada de 4, en la que LeBron James, vestido de oro y púrpura, no pudo clasificarse a la fase eliminatoria. La primera fue la campaña 2018-2019, misma en la que llego el Rey a Los Ángeles.
Ahora, en su año 20 de su magnífica carrera, James quiere regresar a los Lakers a la gloria y ser el primer equipo en alcanzar 18 títulos y así poder conseguir el sueño de la familia Buss y de los aficionados, superar a los Boston Celtics como el equipo más ganador.
La peor participación de LeBron James en postemporada fue en la campaña 20-21 cuando cayeron eliminados en la primera ronda a manos de los Phoenix Suns. Anteriormente, las peores participaciones del Rey en playoffs habían sido un par de semifinales de conferencia.
