Rubiales, directivo de la Real Federación Española de Fútbol, besó en la boca a Jenni Hermoso en la coronación de la Copa Mundial Femenina de la FIFA, mientras hacían entrega de las preseas. Dicho acto está generando controversia y molestia alrededor del mundo.
Durante un en vivo, la jugadora española externó que no le gustó que la besaran y un día más tarde, Rubiales sacó un video donde se disculpa por lo sucedido. Sin embargo, en el video hace ver que se disculpa porque “es lo que toca hacer” y no porque sea una genuina disculpa y arrepentimiento.
Tras lo ocurrido, Megan Rapinoe, capitana, leyenda y feminista del equipo femenil de Estados Unidos, dio su opinión de lo ocurrido en una entrevista para `The Atlantic´. De igual forma, habló del éxito de España en la Copa del Mundo y la desigualdad salarial entre la rama varonil y femenil en el futbol profesional.
Para Megan lo que vivió Jenni Hermoso fue acoso físico por parte de Luis Rubiales. “Piensa en lo mucho que tuvo que soportar el equipo español: algunas de las jugadoras que plantaron el año pasado (para protestar por el mal trato por parte de su entrenador y de la Federación) y ya no están en el equipo”, externó.
“Hay otra imagen que señala un nivel tan profundo de misoginia y sexismo en esa Federación y en ese hombre (Luis Rubiales) en el pitido final, simplemente agarrándose la entrepierna. ¿En qué clase de mundo al revés estamos? En el escenario más grande, donde deberías estar celebrando, Jenni Hermoso tiene que ser agredida físicamente por este tipo”, agregó.
En cuanto a lo futbolístico, destacó que muchas de las jugadoras del conjunto español comparten equipo en la Liga F. La mayoría juega en el Barcelona y ya están acostumbradas a jugar con un mismo estilo. Lo cual facilita a que exista un mejor entendimiento en la cancha.
Finalmente, respecto a la equidad salarial, dijo que las mujeres futbolistas han tenido que jugador dos partidos al mismo tiempo. El primero era contra el equipo rival y el segundo contra el sistema, las autoridades y la desigualdad que existe en todos los sentidos.
“Queremos que esos equipos tengan igualdad de pago, y que cuenten con los recursos que merecen, y que no sufran misoginia, racismo y sexismo”, mencionó Rapinoe, quien hace todo lo posible para que en Estados Unidos se dé la igualdad salarial.
