La iniciativa presentada por el presidente Andrés Manuel López Obrador el pasado mes de julio que busca derogar el horario de verano de manera definitiva fue aprobada en la Cámara de Diputados.
Durante la etapa de sufragios, 445 funcionarios votaron a favor, 33 diputados decidieron abstenerse y ocho votos fueron en contra, principalmente por parte de algunos diputados del PRI y de Movimiento Ciudadano.
A pesar de que la ley se aplicará en todo en el territorio mexicano, existen tres excepciones:
-
Tanto Quintana Roo como Sonora mantendrían sus horarios inalterados debido a motivos turísticos y económicos
-
Los 33 municipios de la franja fronteriza del norte, cuyo horario está sincronizado a las zonas del sur de Estados Unidos, se mantendrá igual por las mismas razones
La eliminación del horario traerá mañanas mucho más luminosas y tardes más oscuras, como sucede en el invierno.
Ahora, la reforma sólo tendrá que pasar por el Senado para eliminar una reforma que se aprobó en 1996, durante el gobierno del ex presidente Ernesto Zedillo.
Entre los argumentos en contra del horario, autoridades como la secretaria de Energía, Rocío Nahle, aseguraron que:
-
El cambio de horario solo ha supuesto un 1% de ahorro energético anual
-
La falta de sincronización con el medio ambiente” provoca “problemas físicos y mentales en el sistema nervioso”
-
El 71% de los mexicanos está en contra del horario de verano
