José María Enríquez Negreira usó el dinero que durante 17 años estuvo recibiendo del Barcelona para obsequiar a los árbitros con diversos regalos de lujo. El Mundo descubre en exclusiva la interminable lista de obsequios que la empresa Dasnil, propiedad del exnúmero dos de los árbitros españoles, rechazó como gastos deducibles.

 

La información descubre que el grueso de esas operaciones consideradas como no deducibles para el fisco español eran regalos dirigidos a los árbitros de Primera División.

 

La documentación de Hacienda revela que Negreira adquirió desde productos propios para el ejercicio del arbitraje, como 1.500 tarjetas rojas y amarillas personalizadas con sus correspondientes porta tarjetas o cientos de monedas para sortear el campo también con la identificación de los receptores, a otros artículos como jamones por importe de unos 10.000 euros, de entradas para partidos de fútbol, palas de playa, sombrillas y bolsas enfriador.

 

Asimismo, hizo lo propio con “sacacorchos, tostadoras, sandwiches, mantas, pantalones o bolígrafos punteros láser”. Las facturas revelan que Negreira aprovechó para invitar a los árbitros a comer en conocidas marisquerías de Madrid y Barcelona en las que pagaba facturas de más de 2.000 euros por comida.

 

“Dulces, vinos, licores y queso”, la compra de lotería en importantes cantidades y la salida de fondos para “invitaciones varias” sin especificar son otros de los apuntes que aparecen en las facturas.

Te podría interesar:  BENZEMA PODRÍA JUGAR LA FINAL DEL MUNDIAL

Por LUIS

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *