Este manantial destaca por su profundo color azul y su forma particular, similar a un ojo. Además, el agua que brota de él contiene altos niveles de azufre, lo que deja el suelo a su alrededor completamente infértil.
Situado en una región montañosa cercana a Lijiang, en la prefectura autónoma de Nujiang, el Ojo del Diablo ha ganado popularidad como un destino turístico muy visitado, ideal para fotografías impresionantes.
El OJO DEL DIABLO (o Fuente Aiken, “aiken” en mongol significa “terrible”) se halla en el Desierto del Gobi, en la provincia de Qinghai al noroeste de China.
El agua que sale del manantial contiene una alta concentración de azufre. Aún así, lo visitan 2.000-3.000 personas/día. pic.twitter.com/l9rXdFbJV1
— Nao Casanova (@NaoCasanova) December 19, 2020
El Ojo del Diablo y el río Nu
El manantial forma parte del sistema hidrográfico del río Nu, y su agua proviene de acuíferos subterráneos que pasan a través de formaciones de roca calcárea. Este proceso geológico le da su vibrante color azul, resultado de la alta concentración de minerales y la pureza de sus aguas.
Los científicos han estudiado el Ojo del Diablo por su ecosistema único y las características químicas de su agua, que es excepcionalmente clara y rica en minerales. Estos estudios también ofrecen información valiosa sobre la geología de la región.
Para llegar al manantial, los visitantes deben emprender un viaje en vehículo desde ciudades cercanas como Lijiang, ya que se encuentra en una zona montañosa remota. Quienes lo visiten podrán disfrutar de oportunidades de ecoturismo, con senderos que invitan a la exploración de la naturaleza local.
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