A partir de este miércoles 21 de agosto los trabajadores del Poder Judicial ingresaron a un paro indefinido como protesta a la Reforma propuesta por el presidente, Andrés Manuel López Obrador.
A pesar de los dichos del Ejecutivo, quien afirma que no afecta a los empleados, los trabajadores han decidido continuar su protesta al considerar que vulnera sus derechos, afecta sus condiciones laborales y limita la carrera judicial.
Esta reforma propone diversos cambios, entre los cuales se encuentran:
- La elección de jueces y magistrados por voto popular
- Una nueva integración de la Suprema Corte de Justicia de la Nación
- La sustitución del Consejo de la Judicatura Federal
- Adición de cuatro reglas procesales
¿Por qué los empleados se opones a la Reforma Judicial?
De acuerdo con Jorge Camargo, exdirector de comunicación social del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) uno de los principales problemas es la afectación a la carrera judicial.
Es decir, que al elegir a los jueces por medio del voto popular, quienes actualmente buscan escalar posiciones para convertirse en jueces no tendrán posibilidades de serlo.
Además, resaltó que actualmente es necesario trabajar casi 15 años dentro del Poder Judicial para poder competir por un puesto de juez, no obstante, esta reforma permitirá a recién egresados acceder a estos puestos sin experiencia alguna.
Según la Ley de Carrera judicial, quienes quieran convertirse en jueces deberán cumplir con ciertas condiciones, tales como:
- Concursos de conocimiento
- Cursos de preparación obligatorios
Estos concursos se dividen en tres fases para garantizar que el ganador fue el más preparado. Las etapas de la búsqueda de un ascenso son:
- Realizar el cuestionario correspondiente
- Ingresar al curso de formación para jueces
- Responder a la evaluación final de la Escuela Federal de Formación Judicial
La Reforma pone en riesgo la autonomía de poderes
Según la declaración formal de paro por parte de los trabajadores, la propuesta de Reforma Judicial violenta los principios de la república, ya que debe existir una división entre los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial.
En caso de aceptar esta propuesta, existe la posibilidad de que el poder Ejecutivo y Legislativo influencien directamente en el Poder Judicial.
Esto significa que, si un mismo partido político domina el Ejecutivo y Legislativo, tendría un papel preponderante en la postulación de candidaturas.
Pone en riesgo la independencia de los jueces
Asimismo, el documento de protesta resalta que las valoraciones de los jueces estarían en duda o responderían a intereses partidistas en caso de que la Reforma Judicial se concrete.
Esto debido a que el juez estaría en deuda con los políticos que le permitieron ingresar al Poder Judicial, gracias a la elección popular.
Y este problema no sería por el simple hecho de que la gente tenga opción de votar, sino por los intereses políticos detrás de una designación.
Camargo explicó que trabajadores, jueces y magistrados demandan que la reforma se deseche y que se abra un proceso de diálogo para crear una reforma integral que involucre a todos los actores afectados, desde ministerios públicos, hasta fiscales, policías y jueces.
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