Aaron Rodgers ha lidiado con una lesión en el pulgar desde octubre, cuando fue capturado por el apoyador de los Giants, Oshane Ximines en la última jugada en el partido disputado en Londres, pero han anunciado este miércoles que la lesión en realidad es una rotura, que de acuerdo con el jugador, no le afectará a su actividad.
“No hace ninguna diferencia en el juego”, explicó Aaron Rodgers. “No hay diferencia. Vieron el video, no hay diferencia”.
A Rodgers se le preguntó a finales de octubre si su pulgar estaba roto a lo que el pasador contestó que únicamente estaba lastimado, esa no fue la única vez que se le preguntó al jugador de los Packers sobre el estado de su dedo, pero nuevamente el jugador lo negó.
Fue hasta este miércoles cuando declaró que estaba roto pero que consideraba que había jugado con lesiones peores.
“Creo que he jugado con lesiones peores”, señaló el miércoles. “Definitivamente es un reto, pero los días de descanso ayudaron. Se siente mejor esta semana”.
“Cuando me lastimé la rodilla en 2018, lanzaba desde el suelo, por lo que definitivamente era difícil en el juego de pies, plantar la pierna (…) Cuando me rompí el dedo índice en la universidad, probablemente era un dedo un poco más importante. Recuerdo que estaba en la práctica y el entrenador Tedford dijo: ‘No me importa lo que te duela, tienes un día libre y si te pierdes otro día de práctica, vuelves a la banca.’ Así que no había elección”.
