La Secretaría de Defensa Nacional (SEDENA) adquirió en 2019 software de espionaje (malware) para el “servicio de monitoreo remoto de información” que sirve para intervenir teléfonos celulares, a pesar de las declaraciones por parte del presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) que condenaban estas conductas.
Una investigación conjunta de Animal Político, la Red en Defensa de los Derechos Digitales (R3D), Proceso y Aristegui Noticias y colectivos como el Citizen Lab en Toronto confirmaron la vulneración en datos personales y en celulares del periodista Ricardo Raphael, el defensor de Derechos Humanos en Nuevo Laredo, Raymundo Ramos y un periodista no identificado por nombre del portal Animal Político.
Según los medios, el espionaje se realizó con una versión más agresiva de Pegasus, donde la víctima recibe una liga con el llamado “malware” y ya no es necesario que siquiera dé click para que esté infectado.
Según la investigación, la compañía israelí NSO, propietaria de Pegasus, únicamente proporciona esta información a gobiernos y lo hace a través de una empresa elegida para comercializar el producto.
Tras la reciente filtración masiva de documentos de la SEDENA por parte del grupo hacktivista Guacamaya, la dependencia militar fue ligada con los contratos a compañías autorizadas a comercializar el Pegasus en México.
El programa Pegasus fue utilizado en 2016 y 2017, durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, por la Sedena, el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (Cisen), además de la Agencia de Investigación Criminal utilizaron Pegasus para espiar a activistas y defensores de derechos humanos.
Además, AMLO aseguró durante su toma de protesta que su gabinete no realizaría espionaje ilegal con Pegasus u otro spyware. En dicha ocasión, el mandatario declaró: “Ya pueden ustedes hablar tranquilamente por teléfono“.
De igual manera, en agosto de 2021, negó cualquier vínculo con empresas de tecnología que vendieran este tipo de software, tales como NSO, creadora de Pegasus.
Durante enero de 2022, el jefe de Ejecutivo reiteró que no se realizaba espionaje; dijo que “ya no existe el estado mayor presidencial, ya eso ya cambió“.
