Habiendo desechado el plan inicial de cambiar a una fórmula de motor híbrido de 2.4 litros para 2024, IndyCar seguirá con sus motores de 2.2 litros impulsados por un sistema de supercondensador común el próximo año, que actualmente se está desarrollando como una empresa conjunta entre motor proveedores Chevrolet (con su socio Ilmor) y Honda.
El presidente de Honda Performance Development, David Salters, dijo a Autosport que después de las primeras dudas sobre la efectividad de un sistema híbrido en pistas ovaladas, ahora se está volviendo evidente lo contrario.
Los conductores podrán usar la estela en las pistas peraltadas de alta velocidad para cargar rápidamente sus paquetes de energía a través de la unidad de generador de motor, que luego pueden volver a implementar a través del tren motriz para atacar al automóvil que está adelante, lo que aumenta las oportunidades de adelantamiento.
“La discusión original fue ‘no estamos seguros de que realmente puedas usar esto en un óvalo’, pero podría resultar que ahí es donde es más efectivo”, dijo Salters. “Ya veremos. Creo que podríamos terminar con algunas cosas geniales no deseadas.
“Tiendes a hacer drafting mucho en los óvalos, y el coche de delante hace un agujero en el aire, así que tal vez quieras ser inteligente, para que realmente te dé mucho más control. Realmente no queremos carreras de grupo, queremos más adelantamientos, pero con las cosas eléctricas que puedes recuperar aquí, entonces puedes hacer lo que quieras.
“Queremos dar más [control] a los conductores, para que puedan hacer cosas diferentes para usarlo. Hay lugares en los óvalos donde ahorra energía y luego puede volver a implementarla, así que tal vez use la inteligencia del conductor para saber cuándo hacerlo.
“Tenemos un grupo de trabajo técnico donde discutimos ‘¿qué hacemos con esto?’ e involucramos a los equipos y pilotos”.
Salters también explicó cómo Chevrolet y Honda están trabajando hacia un objetivo común, habiendo asumido el desarrollo del sistema de Mahle, que desarrolló el concepto híbrido inicial.
“Con IndyCar, junto con GM e Ilmor, nos involucramos más y hay una especie de amor entre nosotros”, dijo. “Normalmente tratamos de matarnos a golpes en el extremo más afilado de una pista de carreras, pero estamos colaborando para que el híbrido cruce la línea de meta.
“Va bien por el momento. Nos ayuda a pivotar más hacia la electrificación. Tienes mucha gente inteligente allí, y todos nos respetamos, así que trabajar juntos en lugar de tratar de vencer a los demás ha sido gratificante.
“Todo este cambio, incluso entre IMSA GTP [que empleó un nuevo sistema de batería híbrida este año] e IndyCar: estamos usando un tipo diferente de almacenamiento de energía, e IndyCar es un supercondensador, y tenemos una asociación técnica con Skeleton.
“Y todo es nuevo, por lo que es técnicamente muy interesante”.
