Alejandro Pérez, uno de los dos sobrevivientes a la masacre en donde murieron cinco jóvenes durnate la madrugada del domingo pasado en Nuevo Laredo, que dejó un saldo de cinco jóvenes muertos, habló por primera vez tras lo sucedido y ofreció su versión de los hechos.
El joven explicó que él, su hermano y sus amigos arribaron a la discoteca Mr. Pig a las 12 de la noche y al salir a las 4 de la mañana, circulaban por la calle Madero.
Detalló que todos estaban a bordo de una camioneta tipo pick-up Silverado Blanca escuchando música y aclaró que no se encontraban consumiendo alcohol.
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“Nadie nos venía siguiendo, no nos marcaron el alto ni hicieron algún llamamiento. De pronto vimos que atrás venía una camioneta de soldados con las luces apagadas, nos chocaron y en menos de un minuto, empezaron los balazos”.
López explicó que él viajaba detrás de Gustavo Suárez, piloto de la unidad, que logró agacharse y comenzó a escuchar gritos.
“Como yo me agaché, nomás escuché gritos, no supe quien gritaba, pero decían: ayúdenme, ayúdenme. Alguien ya estaba herido, yo vi al que está internado ahorita (Luis Gerardo), pedía una ambulancia y vi que le dieron un balazo cuando estaba en el piso, llegó un militar y le dio en la mano”.
Relató que los primeros impactos que recibieron fue en la parte trasera de la camioneta y momentos después, vio a una unidad militar disparándoles en la parte de enfrente.
