Dalai Lama, líder espiritual tibetano, sigue en el centro de la opinión pública tras el vídeo en el que se le ve besando a un niño y pidiéndole que le “chupara la lengua”; recientemente el partido sudafricano Luchadores por la Libertad Económica (EFF) exhortó a las autoridades de India para que detengan al representante espiritual, a quien acusan de ‘abuso infantil’.
A través de su cuenta de Twitter y por medio de un comunicado oficial, el partido expuso las razones por las que consideran que el líder tibetano debería ser detenido:
“La patética disculpa publicada (…) por la oficina del Dalai lama debe ser rechazada con condenación. El abuso infantil no puede ser disculpado”, dijo la formación de izquierda radical, tercera fuerza política de Sudáfrica.
Por su parte, desde la oficina del Dalai Lama, señalaron que ofrecían “disculpas al niño y a su familia, así como a sus muchos amigos de todo el mundo, por el daño que sus palabras han causado”.
Además agregaron que: “Su santidad a menudo toma el pelo a las personas que conoce de forma inocente y traviesa, incluso en público y ante las cámaras”.
Según el partido opositor EFF: “Es revelador que la disculpa se emitiera casi un mes después del deplorable incidente y sólo tras el aumento de la presión por parte de activistas contra el abuso infantil”.
Y añadieron que: “Se supone que los líderes religiosos deben ser protectores, no abusadores de los más vulnerables en la sociedad (de modo que) la ley no debe perdonar a ningún líder religioso que cometa actos abusivos”.
