De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) el terremoto en Turquía y Siria afectó a más de 26 millones de personas, además de dejar un total de 33 mil personas muertas.
Asimismo, las Naciones Unidas confirmaron que la ayuda humanitaria ha tardado en llegar a zonas lejanas en Siria, pues son áreas que aún mantienen conflictos bélicos que no permiten la llegada de los suministros.
Según Martin Griffiths, jefe humanitario de la ONU afirmó que se necesita más apoyo para las millones de personas que perdieron sus casas en el sismo.
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“Hasta ahora le hemos fallado a la gente del noroeste de Siria. Tienen derecho a sentirse abandonados, esperando una ayuda internacional que no ha llegado”, mencionó Griffiths.
Además, tanto la ONU como la OMS emitieron una alerta ante las bajas temperaturas, pues el gélido clima provocará que se detengan las labores de rescate, por lo que se espera que más gente resulte afectada por el sismo.
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Por otra parte, la Organización Mundial de la Salud (OMS) estimó que 26 millones de personas se vieron afectadas por el terremoto y lanzó un pedido urgente para recaudar 42.8 millones de dólares para financiar las necesidades de salud urgentes.
