The Acolyte Episodio 8: Gracias a la Fuerza que fue el fin

The Acolyte, serie de Star Wars, disponible en Disney+, ha sido objeto de múltiples críticas, algunas justificadas y otras no tanto; a continuación, se presenta una reseña detallada del episodio final, lleno de revelaciones, cameos que nada más entorpecen la trama y confrontaciones.

El episodio 8 de The Acolyte culminó con una confrontación esperada por los seguidores.

Mae, tras conocer la verdad, logra escapar de los amarres de Sol, quien se dirige a Brendok para aclarar todo con Vernestra y compañía. Mientras tanto, Osha localiza a Mae gracias al aumento de sensibilidad en la Fuerza que le otorga el casco de cortosis de Quimir.

En una escena breve pero impactante, The Acolyte presenta a un siniestro personaje entre las sombras de una cueva.

Unos ojos amarillos incandescentes revelan la presencia de Darth Plagueis el Sabio, maestro de Palpatine, quien enseñó al futuro Emperador todo lo que sabía, incluso la creación de vida (si es que los creativos no optan por cargarse esa historia del Canon).
Esta revelación ha sido esperada por los fans para saber que en esta era es vigente la ‘regla de dos’.

El episodio muestra cómo Osha convierte el sable del caído maestro Sol en un auténtico sable Sith, con su característico color rojo. Esta técnica del lado oscuro de la Fuerza, conocida como “sangrado”, había sido anticipada desde su aparición en una novela protagonizada por Ahsoka en 2017.

Comparando lo visto en The Acolyte con los cómics de Darth Vader, se observan similitudes y diferencias interesantes. En ambos casos, el proceso de sangrado no es simplemente una transformación física, sino un acto simbólico que refleja la corrupción interna del personaje.

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Análisis de la temporada y su impacto en la saga

A lo largo de su primera temporada, The Acolyte ha sido una montaña rusa de críticas y opiniones.

Desde su tercer episodio, la serie ha mostrado problemas de enfoque y resolución de conflictos, a menudo debido a la incapacidad de los personajes para comunicarse de forma directa. Aunque esta (mal llamada) técnica funciona en ciertos contextos, su uso repetitivo puede resultar frustrante para los espectadores.

El epílogo de The Acolyte

Vernestra se encarga de hacer control de daños, cargando las culpas a Sol, lo que parece satisfacer, de momento, a la comisión del senado. Posteriormente, solicita a Mae que le ayude a localizar a Quimir, quien resulta ser un antiguo discípulo suyo.

La temporada concluye con Vernestra buscando consejo nada menos que de Yoda, a quien se ve solo de espaldas.

Conclusión, si es que tiene…

La primera temporada de The Acolyte ha demostrado que es posible contar una buena historia de Star Wars saliéndose de las convenciones habituales de la franquicia; pero no ha encontrado al ‘capitán’ y tripulación adecuada para navegar a buen puerto la historia.

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