Un juzgado de Palma (España) impuso una pena de un año de prisión para el aficionado que realizó insultos racistas sobre el futbolista brasileño Vinicius Jr en Mallorca. El episodio sucedió el 5 de febrero de 2023, en un partido de la liga española de fútbol entre el Real Mallorca y el Real Madrid.
LaLiga tomó cartas en el asunto al abrir un expediente y el caso llegó a los tribunales. Posteriormente, resultó que el autor de la agresión verbal sobre Vinicius también estuvo implicado en el episodio racista sobre el jugador del Villarreal Samu Chukwueze, en la visita del Submarino Amarillo a Son Moix. Esta reincidencia fue un agravante que derivó en la condena conocida este jueves.
El presidente de LaLiga, Javier Tebas, celebró la sentencia y aseguró que la organización seguirá colaborando con las autoridades para combatir el racismo en los estadios. “Es el resultado del trabajo que llevamos haciendo los últimos años para erradicar el odio de nuestro fútbol. Y seguiremos. No habrá grito o cántico racista en un estadio sin condena penal”, escribió en su cuenta de X.
Tres años de prohibición en estadios
Además de una condena a doce meses de cárcel, el juzgado también prohibió al implicado la asistencia a estadios del fútbol español por los próximos tres años. Esto incluye tanto aquellos partidos organizados por LaLiga como por la Real Federación Española de Fútbol, como pueden ser encuentros de la Copa del Rey o de la selección española.
Castigo para el menor que insultó a Tchouaméni
Ese fallo judicial también recogió el caso de los insultos racistas de un menor de edad sobre Aurelién Tchouaméni, ocurridos en en abril del año en curso. El joven, que agredió verbalmente y arrojó una botella sobre el mediocampista francés, recibió una multa, un prohibición de un año en estadios y la obligación de realizar actividades socio educativas.
Segunda condena por racismo sobre Vinicius
La de este jueves es la segunda condena por racismo dentro del fútbol español. El único antecedente al respecto también involucra agresiones verbales sobre Vinicius, cuando el brasileño fue insultado por un grupo de aficionados en Mestalla. En aquella ocasión, tres hombres fueron condenados a ocho meses de prisión por un delito contra la integridad moral con agravante de odio. LaLiga presumió el caso como la primera sentencia por racismo en los estadios, en su lucha por erradicar la discriminación racial de los estadios.
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